Planificación
Recomendaciones para ahorrar en vacaciones y sacarl...
Recomendaciones para ahorrar en vacaciones y sacarle el mayor provecho a tu presupuesto...
Planificación
| 28 de noviembre de 2023
Publicado por: SanodeLucas
Si estás interesado en comenzar a invertir para sacarle un mayor provecho a tu dinero, en Sanodelucas te explicaremos cómo funcionan dos de las principales alternativas que ofrece el mercado, los depósitos a plazo y los fondos mutuos.
Invertir es una excelente manera de hacer crecer tu dinero y alcanzar tus metas financieras a largo plazo. Aunque existen muchas opciones de inversión disponibles, dos de las más populares son los depósitos a plazo y los fondos mutuos, ya que mientras los depósitos ofrecen seguridad y estabilidad, los fondos ponen a tu disposición diversificación y liquidez.
Depósitos a Plazo: ¿Qué es y cómo funciona?
El Depósito a Plazo, o DAP, es el instrumento de inversión en renta fija más simple del mercado, ideal para ahorrar y diversificar de forma estable y segura tu dinero, con un muy bajo riesgo.
Un Depósito a Plazo (DAP) es un instrumento financiero que permite ahorrar un monto determinado de dinero, a un plazo específico, que es mínimo una semana (7 días) y máximo un año (365 días), y donde al final del periodo tu dinero se verá incrementado gracias a una tasa de interés.
Los Depósitos a Plazo destacan por su bajo riesgo, ya que desde un principio conocerás cuál será la ganancia que recibirás, lo que depende del monto invertido y del plazo que elijas.
Una característica de los Depósitos a Plazo es que ofrecen rentabilidades pequeñas, pero estables y conocidas desde el principio, las que dependen directamente de la Tasa de Política Monetaria del Banco Central (TPM, actualmente en 9%). La TPM fija el interés con que el Banco Central presta dinero a los bancos comerciales, y de ahí de adelante es utilizada como referencia para los depósitos de las personas.
Actualmente, un Depósito a Plazo promedio entrega una rentabilidad anual promedio entre 8% y 9%. Sin embargo, la ventaja de este tipo de instrumentos financieros es que te permitirán organizar y tener pleno control de tu dinero en el tiempo.
¿Qué tipos de Depósitos a Plazo existen?
Los Depósitos a Plazo se pueden clasificar dependiendo de la moneda en la que se realice el depósito, el plazo, y si será fijo o renovable automáticamente.
Si el Depósito a Plazo se realiza en pesos, entregará una tasa de interés fija que es conocida desde el principio, lo que disminuye prácticamente a cero el riesgo. En cambio, si se invierte en UF (Unidades de Fomento), se entrega una tasa de interés fija y el resto dependerá de la variación de la UF (ligada directamente a la variación de la inflación y el IPC), durante el plazo de duración del depósito. En tanto, si el Depósito a Plazo se realiza en dólares, se comporta de igual forma que si se realizara en pesos, entregando una tasa de interés fija en dólares que es conocida desde el comienzo.
Respecto al plazo, en los depósitos a plazo este corresponde a los días en que el dinero estará ahorrado y generará intereses. A mayor cantidad de días, mayor será la rentabilidad.
Cuando se cumpla el plazo, el dinero podrá ser cobrado y retirado para utilizarlo libremente. Por norma general, no se puede hacer uso del dinero antes de que se cumpla el plazo, salvo excepciones que dependerán de la institución financiera que ofrece el Depósito a Plazo.
¿Qué significa que un Depósito a Plazo sea fijo o renovable?
Un Depósito a Plazo puede ser Fijo, cuando se quiere ahorrar por un periodo definido que, al cumplirse, el dinero es liberado, junto con los intereses, para utilizarlo libremente. En cambio, cuando un Depósito a Plazo es Renovable significa que cuando se cumple el plazo del vencimiento, tendrás 3 días para retirar el dinero, de lo contrario, el DAP se renovará automáticamente por el mismo plazo inicial, capitalizando los intereses ganados. Esta modalidad es conveniente cuando se quiere ahorrar dinero por un tiempo indefinido.
Fondos Mutuos: ¿Qué es y cómo funciona?
Los Fondos Mutuos (FFMM) son un tipo de vehículo de inversión que consiste en la agrupación de los capitales de una gran cantidad de partícipes, que luego son dirigidos como un todo hacia mercados y activos tan surtidos como commodities, bonos, renta fija o variable de Chile, Europa, Asia o Estados Unidos.
Invirtiendo en Fondos Mutuos, cualquier persona, por muy poco dinero que tenga, puede invertir en un enorme abanico de posibilidades.
Sus principales características son:
Considerando estás características, si estás interesado en invertir en Fondos Mutuos, en Chile existen más de 500 FFMM diferentes. Junto con esto, tomando en cuenta las distintas series que tienen, existen más de 4.000 instrumentos en los que puedes invertir.
¿Cómo invertir en Fondos Mutuos?
Si estás decidido a invertir en Fondos Mutuos, existen diversas alternativas para comenzar. La más sencilla es que, si tienes una cuenta bancaria, averigües en tu banco si te ofrece la posibilidad de invertir en Fondos Mutuos. De esta forma ahorrarás el tiempo y trámite que implica abrir una cuenta de cliente en una Administradora General de Fondos (AGF).
En caso contrario, deberás abrir una cuenta en una AGF, que son instituciones financieras especializadas en inversión y que ofrecen una amplia variedad de Fondos Mutuos a los que podrás acceder dependiendo de tu perfil de inversión, esto es, si eres conservador, moderado o audaz.
Ahora que conoces ambas alternativas, lo más importante es que inviertas en lo que entiendes, ya que invertir en instrumentos o activos que no conoces puede llevarte a perder tu dinero. Junto con esto, establece un plazo de inversión, fijando metas respecto a lo que quieres conseguir: realizar una remodelación en tu casa, tomar unas vacaciones, comprar un auto nuevo, adquirir un departamento o incrementar el monto de tu pensión. Sabiendo esto, podrás escoger la inversión más conveniente para ti.
Fuentes:
¿te ha parecido útil este artículo?